John Ackerman

Salarios justos

La Jornada, 17 de diciembre, 2018

Por: John M. Ackerman (@JohnMAckerman)

 

 

Los salarios estratosféricos de los ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) y de los altos ejecutivos del sector privado no tienen justificación moral, ética o profesional en un país donde por lo menos 53 millones de personas se encuentran bajo la línea de pobreza y 9 millones sobreviven en la miseria.

México es un país rico, la decimoquinta economía más grande del mundo, con un producto interno bruto (PIB) de 1.15 billones de dólares estadunidenses. Si las ganancias de la economía nacional fueran repartidas de manera equitativa entre los mexicanos, todos tendrían ingresos suficientes para cubrir sus necesidades básicas.

El PIB per cápita en México hoy alcanza unos 9 mil dólares, o 180 mil pesos, anuales. Así que en una situación de reparto estrictamente equitativo, una familia de cuatro personas recibiría 720 mil pesos al año, o 65 mil al mes, una cifra que permitiría una vida perfectamente digna para todos.

¿Por qué entonces no ganan todas las familias mexicanas un ingreso de 65 mil pesos al mes?

Ministros de la SCJN. Foto: Especial

En principio, los productos de la economía nacional son resultado del trabajo de todos. Los corredores de bolsa, los trabajadores de limpieza, los jueces de distrito, los carpinteros, los pequeños empresarios, los estudiantes, los profesores, los ejecutivos de empresas trasnacionales, los taxistas, los plomeros y las amas de casa, todos contribuimos con nuestro sudor y esfuerzo cotidiano para mantener a flote la economía nacional.

Lamentablemente, el mercado no valora por igual el trabajo de todos. A algunas personas se les asigna un salario muy abultado y a otros un ingreso miserable, aunque ambos laboren exactamente la misma cantidad de horas. Otras personas, como los estudiantes y las amas de casa, no reciben absolutamente nada a cambio de su entrega diaria a la causa social.

En un sistema neoliberal como el que predomina hoy en el mundo, el mercado no trabaja en función de principios éticos o sociales, sino estrictamente en favor de la ganancia máxima.

Andrés Manuel López Obrador respeta absolutamente al sector privado y ha señalado que no implementará ninguna reforma que pudiera implicar una intromisión en la libertad del mercado. También se ha comprometido a respetar la independencia del Banco de México y a no elevar los impuestos.

El Presidente Andrés Manuel López Obrador. Foto: Especial

Sin embargo, el nuevo Presidente ha decidido dar un ejemplo de justicia salarial dentro del sector público. Los 108 mil pesos que recibirá para mantener a su familia son mucho más que el estándar equitativo de 65 mil. Los 43 mil pesos adicionales se justifican, desde luego, por la importancia de su cargo y por las capacidades especiales de liderazgo y de honestidad con las que cuenta.

De la misma manera se pueden justificar privilegios salariales para otras personas. Por ejemplo, quienes cuentan con conocimientos especializados, trabajan horas extras o necesitan protecciones especiales en su trabajo, como los doctores, los jueces, los maestros y los mandos policiacos, merecen, sin duda, un reconocimiento especial por sus importantes labores en favor de la colectividad.

Pero muy difícilmente se puede justificar un ingreso de casi 7 millones de pesos anuales para el ministro presidente de la SCJN. Quienes ganan cantidades similares, o mayores, en el sector privado también se apartan de criterios éticos básicos.

Ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación. Foto: Especial

Recordemos que la primera frase del artículo 123 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos señala sin rodeos que toda persona tiene derecho al trabajo digno y socialmente útil y que el artículo 27 de la misma Carta Magna establece la vocación colectiva y social de la propiedad al señalar que las tierras y aguas comprendidas dentro de los límites del territorio nacional, corresponde originariamente a la Nación.

Si los integrantes del Poder Judicial que hoy protestan contra las medidas de austeridad realmente estuvieran interesados en el cumplimiento estricto de la Constitución, demostrarían la misma indignación con respecto al incumplimiento generalizado del artículo 123 para los millones de desempleados del país, así como la inaceptable brecha salarial que existe tanto en el sector público como en el privado en México.

La aplicación estricta del artículo 127 de la Constitución, que determina que ningún funcionario público puede ganar más que el Presidente de la República, a todos los poderes del Estado mexicano no implica de ninguna manera una intromisión en la autonomía del Poder Judicial. Al contrario, el intento de remover el Poder Judicial de la aplicación de esta norma general, de crear un estado de excepción para un solo poder, busca colocar a los jueces por encima del Estado de derecho. Esta defensa de los privilegios de los juzgadores implica una grave afectación a una sana división de poderes basada en un control y equilibrio mutuo entre los diferentes órganos del Estado mexicano.

John M. Ackerman

Director del Programa Universitario de Estudios sobre Democracia, Justicia y Sociedad (PUEDJS) e Investigador del Instituto de Investigaciones Jurídicas de la UNAM. Escritor y activista. Doctor en Sociología Política y Doctor en Derecho Constitucional.

Comentarios

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  • Texto muy acertado, sin duda. Solamente añadiría, para complementar sus comentarios acerca de la Corte, el caso de los funcionarios y los notables de la UNAM. ¿Cuánto ganan en realidad el Rector y los altos mandos a su alrededor? ¿Por qué la transparencia es terra ignota en la universidad? Trabajemos ese asunto.

  • Que explique el Ministro Alfredo Gutiérrez cómo “regularizó” los expedientes de cien agentes aduanales a los que les otorgaron patentes sin tener título profesional, en lugar de cancelarlas, cuando fue jefe del SAT !

  • Te remito a mi artículo fechado en mayo del presente año «Salario Mínimo». En el analizo los salarios justos de acuerdo al salario mínimo vigente en cada país. Toco el pensamiento de Peter Drucker y al final llegó a la conclusión de que el salario justo del presidente de México deberá de ser de 51,000.00 pesos aproximadamente condiciones de este año. Y todos los demás servidores públicos por debajo. Si bien nuestro actual presidente está solo dos veces por arriba lo justo es lo que arroja el estudio.

    Dr. Willy Azarcoya Cabiedes
    https://aeipnqueretaro.wordpress.com

  • Es encomiable que los sueldos mínimos fuesen para tener una vida digna, y quizás para un padre de 2 hijos requeriría por un decir $500.00, el reto es dar las condiciones para que sin «Quebrar» a las empresas, se pueda lograr, tarea nada fácil. Se ocupa que la «productividad» de esos empleos permitiera esos sueldos. Por otro lado, es triste que defendiendo la «autonomía» del sector Judicial, se defiendan esos salarios tan altos. Creo posible que a quienes contrate el Gobierno de aquí en adelante puedan aplicar ese nuevo criterio. La cosa es que la 4ta. Trans. esbozan «buenos deseos» por no hacen la tarea acerca de como lograrlos, por ejemplo, las gasolinas ya nos dijeron que terminando la nueva refinería, la cual sospecho que no va a producir nada antes de 6 años. La corrupción igual, no se ve que tengan claro como reducirla, el sector salud, parecido, la educación , el turismo, etc. parece que no tienen claro como lograr lo prometido.

  • En total acuerdo con J. Ackerman, la autonomía del Poder Judicial es cosa tóalmente diferente a la determinación de que ningún funcionario público puede ganar más que el Presidente de la República. Los otros argumentos en contario son simple avaricia y egoismo de los mismos representantes de la justicia que debería representar al pueblo todo.
    Aprovechemos para echarlos, ya es hora de acabar con toda esa impunidad, racista y clasista también.

  • los altos salarios del sector privado. esos no son incumbencia de nadie. Eso incumbe a la empresa y el trabajador. Los bajos salarios, si son incumbencia del gobierno, ahi es donde deben impactar las políticas de amlo.

  • Estimado eseo preguntar dos cosas, primero, si el presupuesto de egresos entregado ya a las cámaras contempla la reducción forzoza del salario de los magistrados a pesar de la suspensión de la ley de ingresos y remunieracioes y, segundo, si el proyecto de los superdelegados que iban a vigilar a los gobernadores, ya no se llevará a cabo en definitiva. Si ambas cosas no se llevaran a cabo será un duro golpe a la cuarta transformación. Gracias y saludos!

  • Estimado Dr. Ackerman,

    Un estupendo artículo para variar. Una llamada de atención a los que se suponen que imparten justicia en México. ¡Qué vergüenza! Saludos y gracias

  • Los Jueces de suprema corte de Justicia en USA ganan $251,800.00 Dolares anuales antes de impuestos., en Mexico ese mismo trabajo vale $350,000.00 Dolares. anualmente .(Desconozco si es antes o despues de impuestos).
    El PPP de Mexico ,Purchasing Power Parity, es de 17,336.00
    El PPP de USA es $54,225.00.
    E PPP es en mi juicio una manera mas objetiva de analizar riqueza .
    Estos salarios son ciertamente una aberracion y un Insulto a Mexico. Mas que una consequencia de los defectos de el Sistema neoliberal y de Libre Mercado, esto, en Mexico, es una consequencia de la corrupcion.Alguien, en algun momento aprobo esos salarios.
    Es sistema neoliberal aunque imperfecto, funciona.Simplemente a que dirigir la Mirada al Norte, Los logros de la Civilizacion de el mundo Occidental lo constatan. Sus avances los disfrutan aun aquellos como el Dr. John Ackerman, que se oponen a este sistema.
    El estandar equitativo y socialmente aceptable no hubiera sido suficiente para que John hubiera podido pagarse una muy costosa educacion es uno de los mas prestigiados Liberal Art College de USA como lo es Swarthmore , con un costo actual de $60,000.00 Dolares y una Maestria y Doctorado en La Universidad de California por otros 30,000 Dolares anuales.
    Preocupante ver que alguien que se ha beneficiado tanto de este sistema lo desconozca y este tan cerca de AMLO.
    Mexico debe aspirar a ser un verdadera meritocracia, el mas cercano ejemplo es USA.Si, de acuerdo, es una Meritocracia imperfecta pero esperanzadora para todos los que vivimos en este bello y justo Pais USA. La manera de combatir la corrupcion y la nefasta asociacion de el sector privado Mexicano con el gobierno es abrir mas el Mercado para que exista mas competencia. Doloroso ha sido pero necesario.

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